Aquí
estamos de nuevo, en el mejor momento para saborear ese “oro
blanco” que es el bacalao, y que se pesca desde finales de otoño
hasta la primavera.
Su
carne firme de color blanco, su estructura en lascas y su sabor suave
lo convierten en un pescado perfecto en una grandísima variedad de
platos. Pero, además, capaz de llevarse bien con una amplia gama de
ingredientes.
Como
todos los pescados, el bacalao sólo requiere un calor/fuego moderado
durante un breve espacio de tiempo.
Aunque
lo compre en fresco, por precaución siempre lo congelo un par de
días. Un día antes de consumirlo lo descongelo en la parte superior
de la nevera.
INGREDIENTES
PARA 2 PERSONAS
4
lomos de bacalao fresco.
1
cebolla.
4
dientes de ajo.
Pimiento
del piquillo asado, a tiras.
1
cayena.
Sal.
Pimienta
negra.
PREPARACIÓN
En
una sartén o cazuela con aceite de oliva virgen extra pochamos la
cebolla y los ajos. Le añadimos el pimiento del piquillo a titas y
la cayena desmenuzada. Removemos. Y cuando la cebolla éste
translucida, apagamo el fuego.
Lo
vertemos en una fuente, ponemos los lomos de bacalao encima, los
salpimentamos y lo metemos en el horno previamente calentado a 180º
durante unos 10-15 minutos según hornos. ¡Y listo!.