Uno de los lugares más emblemáticos para comerse unas clóchinas, que es como se llaman los mejillones en Valencia, es el Bar Pilar, también conocido como “La Pilareta” (Carrer del Moro Zeit, 13, en Ciutat Vella, Valencia).
Fundado en 1918, es un clásico del tapeo en la ciudad de Valencia. Famoso por su vermouth valenciano y, sobre todo, sus clóchinas valencianas al vapor, con un toque muy especial en su preparación que las diferencia del resto.
Por supuesto que puedes pedir otras cosas, como una excelente ensaladilla o unas patatas bravas con un vermouth o una cerveza. Pero la gente, a lo que va al Bar Pilar, es a degustar un buen plato de clóchinas. Es de agradecer que, con el paso del tiempo, se haya mantenido activo.
Por desgracia, algunos han pasado a ser historia después de una etapa de esplendor en la década de los 70.
Uno de ellos era una pequeña bodega a espaldas de la calle Serrano, en el Barrio del Carmen. En la trastienda, con apenas 3 mesas, podías disfrutar de las mejores sardinas asadas con carbón de la ciudad y un buen vaso de vino.
El otro, próximo al Mercado Central, era el diminuto Bar Pepe, con tan sólo una barra en la que no cabían más de 6 personas. Eso suponía, siempre, el tener que hacer cola en la calle.
¿Qué ofrecía el Bar Pepe para tener tanto éxito?. Pues unas sabrosas “Chuletas de Huerta”. Eso, y una cerveza o un vaso de vino. No tenía otra cosa. Las famosas “Chuletas de Huerta” no eran otra cosa que patatas partidas por la mitad y asadas, que servían con un poco de allioli (el de ajo y aceite solamente) y pimentón colorado por encima.
El bar estaba llevado por dos hermanos. Ella en la cocina, que es lo mismo que decir al lado de la barra de lo pequeño que era el local; y el atendiendo los pedidos. Siempre estaban discutiendo entre ellos por la cosa más tonta, y cuanto te acababas de ración de “chuleta”, nada de cháchara, a dejar tu sitio al siguiente.
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS1 kilo de clóchinas.
4 dientes de ajo.
1 limón exprimido.
1 hoja de laurel.
Pimentón colorado.
2 guindillas (cayena).
Aceite de Oliva.
PREPARACIÓN
Limpiamos bien las clóchinas. En una olla ponemos el aceite y sofreímos los ajos. Añadimos el laurel y las guindillas. Echamos el pimentón colorado e inmediatamente el zumo de un limón.
A continuación ponemos las clóchinas. Tapamos la olla y, a fuego fuerte, las tenemos unos 5 u 8 minutos aproximadamente.
Fundado en 1918, es un clásico del tapeo en la ciudad de Valencia. Famoso por su vermouth valenciano y, sobre todo, sus clóchinas valencianas al vapor, con un toque muy especial en su preparación que las diferencia del resto.
Por supuesto que puedes pedir otras cosas, como una excelente ensaladilla o unas patatas bravas con un vermouth o una cerveza. Pero la gente, a lo que va al Bar Pilar, es a degustar un buen plato de clóchinas. Es de agradecer que, con el paso del tiempo, se haya mantenido activo.
Por desgracia, algunos han pasado a ser historia después de una etapa de esplendor en la década de los 70.
Uno de ellos era una pequeña bodega a espaldas de la calle Serrano, en el Barrio del Carmen. En la trastienda, con apenas 3 mesas, podías disfrutar de las mejores sardinas asadas con carbón de la ciudad y un buen vaso de vino.
El otro, próximo al Mercado Central, era el diminuto Bar Pepe, con tan sólo una barra en la que no cabían más de 6 personas. Eso suponía, siempre, el tener que hacer cola en la calle.
¿Qué ofrecía el Bar Pepe para tener tanto éxito?. Pues unas sabrosas “Chuletas de Huerta”. Eso, y una cerveza o un vaso de vino. No tenía otra cosa. Las famosas “Chuletas de Huerta” no eran otra cosa que patatas partidas por la mitad y asadas, que servían con un poco de allioli (el de ajo y aceite solamente) y pimentón colorado por encima.
El bar estaba llevado por dos hermanos. Ella en la cocina, que es lo mismo que decir al lado de la barra de lo pequeño que era el local; y el atendiendo los pedidos. Siempre estaban discutiendo entre ellos por la cosa más tonta, y cuanto te acababas de ración de “chuleta”, nada de cháchara, a dejar tu sitio al siguiente.
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS1 kilo de clóchinas.
4 dientes de ajo.
1 limón exprimido.
1 hoja de laurel.
Pimentón colorado.
2 guindillas (cayena).
Aceite de Oliva.
PREPARACIÓN
Limpiamos bien las clóchinas. En una olla ponemos el aceite y sofreímos los ajos. Añadimos el laurel y las guindillas. Echamos el pimentón colorado e inmediatamente el zumo de un limón.
A continuación ponemos las clóchinas. Tapamos la olla y, a fuego fuerte, las tenemos unos 5 u 8 minutos aproximadamente.
Oye que bien pinta ese bar!!! y los mejillones al vapor se ven en todo su esplendor, asi es como mas ricos están, sin enmascarar.
ResponderEliminarUn beso
AFri
Es una pena cuando van cerrando esos sitios a los que nos gusta ir.
ResponderEliminarEstos mejillones se ven muy ricos.
¡Cómo se cuidan!
Besitos.
;-D
Por aquí, se les conoce también como mojojones, y así tan cuales estan de autentico vicio. Besos
ResponderEliminarCon mi habitual despiste, cuando iba a Valencia las pedía con acento en la ó, "clóchinas", en un bar que estaba por la Malvarrosa. No me acuerdo del nombre.
ResponderEliminarPero bueno, aparte de eso, tomo nota de la receta para sorprender a mis amigos belgas. Aquí, en Bélgica, los mejillones (moules) pueden considerarse el plato nacional. No sé si cuando tú andabas por París estaba ya la sucursal de "Chez Léon" en les Halles, pero ahora tiene restaurantes por toda Francia, donde dan mejillones a la belga: cocidos con muuuucho apio y cebolla y, por supuesto, patatas fritas.
Lo dicho, que voy a hacer una soirée clóchinas en Bruselas... euh... clochinas
Muy ricos los mejillones al vapor.
ResponderEliminarEn mi tierra (Galicia), son de una calidad especial y cuando estoy allí es cuando los tomo.
Un saludo
Jorge
MMMmmmmm, me gusta como los haces, una forma nueva para mi, los probaremos.
ResponderEliminarAh! ya he aprendido algo hoy "clochinas"
Muas!
¡Que ricos! Es bueno saberlo, para cuando vaya a Valencia, me encantan los mejillones.
ResponderEliminarUn abrazo.
No me gustan los mejillones, pero ese bar tiene toda la pinta de añejo que nos han comentado, por Gijón hay ya muy pocos así, Madrid es un buen ejemplo de lugares con historia
ResponderEliminarSon un tesoro a conservar.
Ah, pero qué delicia, por favor, me encantan. Gracias por el dato del restaurante.
ResponderEliminarSaludos
LOLI. Efectivamente, cuando menos cosas más ricas. Pero, eso sí, deben ser frescas-frescas.
ResponderEliminarAMANDA. Es verdad, da pena que desaparezcan. Pero afortunadamente nacen otros nuevos.
CARMEN. El vivio es completo con una cervecita... y si hay MAR, que te voy a decir.
SOROKIN. Me he puesto "colorao". Ya tiene palito la "o", que es lo que toca.
Y en Les Halles, creo recordar, que por aquella época tenía un enorme agujero en lo que era su mercado..., más tarde le nació una seta llamada Centro de Arte y Cultura Georges Pompidou.
Que pinta más estupenda tiene ese bar, y las clóchinas que sin son frescas y buenas al vapor es como mejor están, para llenarse la boca con todo su sabor ..... una delicia.
ResponderEliminarbsts. maite
Me encantan las clotxinas y no es por llevarte la contraria pero la clotxina al ser del mediterraneo tiene un sabor distinto al mejillón (hasta los 29 solo comí mejillones en el norte nose estilan mucho)
ResponderEliminarUn besazo y gracias por el consejo Habrá que visitar el Bar Pilar
No los habia oido con este nombre, y al parecer deben tener sabor distinto. A mi me encantan los mejillones al vapor y normalmente no le pongo nada. Probare asi con esatas especias.
ResponderEliminarUn beso
Qué lindos recuerdos de esos bares de antaño, parece que en todas partes van desapareciendo, pero por suerte surgen nuevos, iguales o mejores.
ResponderEliminarAquí en Chile se llama "choritos" a los mejillones y hay unos muy grandes que llevan el nombre de "cholgas", me encanta ver cómo cambian los nombres de sitio en sitio.
Un abrazo
Mi suegra tambien se llama Pilar,y hace las clochinas como estas,pero pone todos los ingredientes en crudo sin sofreir...le salen de muerte...me imagino que sofriendolos un poco aun tendran mas sabor...la poxima vez que prepare las probare asi.
ResponderEliminarBesets.
DON CAMILO Y CALDERETA. Lo bueno que tienen es que se preparan en nada y están muy ricas.
ResponderEliminarMARÍA ALONSO. Totalmente de acuerdo... tienen otro sabor. Y si tienes la suerte de poder cojerlas tu mismo, por la zona de Cullera, Denia o Moraira, están mucho mejor.
ORI. El sabor de la clóchina es más suave que el que tiene el mejillón gallego. También son más pequeñas.
PAMELA. Te da nostalgía que algunos de estos sitios hayan desaparecido... es como si se perdiera una parte de tu historia. Pero el tiempo es así...avanza.
PUSORONENITO. Que te voy a decir, hablar de mejillones es hablar de Galicia.
ResponderEliminarGEMMA. Rapiditos de hacer y sabrones... con ese toque picante.
AMPARO. Pues ya sabes, a darte una vueltecilla que están al lado de La Lonja y el Mercado Central.
ISABEL. Siempre se puede pedir otra cosa, pero lo cierto es que el 90% de la gente que va a ese bar es a comer clóchinas.
CLAUDIA. Después de la gran cantidad de información que nos regalas, estaba un poco en deuda, y como tenía el día un poco nostálgico, pues...
MESILDA. Seguro que te gustan. Pero el sofrito de los ajos hay que hacerlo muy rápido, que sólo dejen un poco de sabor en el aceite.
A mi me encantan las clochinas. A veces traen aquí a la pescaderia de mi barrio en Murcia, y como disfruto, aunque sean más pequeñas que los mejillones,pero que gustosas estan.
ResponderEliminarRiqui´simas las tuyas, dan ganas de coger una.
Besos
The mussels looks delicious.
ResponderEliminarse llamen como se llamen están deliciosos....
ResponderEliminarbesitos.
Los mejillones me encantan, los como muchísimo, en casa y cuando salgo fuera, están deliciosos!
ResponderEliminarBesos,
Nasy
Los mejillones son de mis preferidos...La entrada muy bonita con un bar que tiene una pinta excelente.
ResponderEliminarBesos
Esos mejillonzucos así al vapor es como mejor están! todo el sabor del mar en un sólo bocado!!!! me reflipan los mejillones!! y así más!!!!
ResponderEliminar;-)
Al principio de ir por Valencia no sabía que se llamaban de este modo, pero fue mi nuera quien me lo enseñó igual que las bajoquetas.
ResponderEliminarUna receta muy rica.
Tomo nota del Bar Pilar y le paso la dirección a mi hijo por si no lo conoce.
Besos.
Primera vez que escucho (o leo....) el nombre clochinas....super interesante.....la receta se ve deliciosa ....a mi los mejillones me encantan!.....y me gusta mucho visitar los bares con historia....que pena algunos vayan cerrando.....parte de nuestra historia se va con ellos......Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarYo las descubrí tarde también y me encantaron, más pequeñas que los mejillones, pero más ricas para mi.
ResponderEliminarInteresante dato el del bar, porque estos sitios hay que conocerlos y mantenerlos.
Un abrazo.
Clóchinas, musclos, mejillones, es diguin com es diguin, per a mi són el fruit més gustós del mar, ho sento, però algú ho havia de dir.
ResponderEliminarPues con ese nombre no los conocía, y no me extraña que estén riquísimos con ese aliño, ahora que lo mejor será que me los coma en el Bar Pilar. ojalá!
ResponderEliminarUn beso
Que delicia, cómo me gustan los mejillones así ó clóchinas cómo llamáis vosotros.
ResponderEliminarEstupenda receta.
Besos
Sin duda riquisimas, y la ventaja que tienen és que en un plis plas las tienes en la mesa.... que buenos esos sitios de comida de toda la vida,me encantan!!
ResponderEliminarJudith
no sabía que las llamaban así! excelente dato! :)
ResponderEliminarHoy he aprendido varias cosas: las clóchinas y un lugar emblemático para porbarlas.. Un plato muy sano, rápido y delicioso!!!!
ResponderEliminarQué ricura,encima sanos y económicos.
ResponderEliminarGracias a todos por vuestro paseo por el blog...
ResponderEliminar...y voy preparando más raciones de clóchinas para tod@s.
Hola, tomo nota para los próximos mejillones!!
ResponderEliminarGracias por tu visita, Besos :)