En esta ocasión no vamos a explicar ninguna receta, sino algo tan
entrañable como esa “Fiesta” que se crea entorno a una Calçotada entre amigos o
simplemente recién conocidos, en un ambiente de diálogo, de amistad, de
jolgorio entorno a los calçots.
Descobreixl’Horta, situada en Borbotó, una pedanía de Valencia, a unos 3 kilómetros de la ciudad,
y en plena huerta valenciana, suele organizar animadas comidas con el objetivo
de dar a conocer la
Huerta Valenciana , sus tradiciones y costumbres, en aprender
a cocinar la auténtica Paella Valenciana a leña, un buen arròs amb fesols inaps o, como en este caso, una calçotada.
Este
entorno de la huerta, regada por las tradicionales acequias, da la oportunidad
al visitante de poder realizar un agradable y didáctico paseo, donde observar
los distintos cultivos según la época del año con las amenas explicaciones de
Carmen o Fernando.
Un interesante proyecto con algo más de un año que, en este escaso
tiempo, ha logrado atraer el interés de diversos grupos de turistas y
visitantes nacionales y extranjeros, que estén interesados en conocer el
proceso de cocinar una paella, o cualquier otro plato de nuestra gastronomía.
El día en cuestión se
inició con una visita al Jardín Mediterráneo y
Huerta Ecológica, con explicaciones de cómo se realiza el cultivo "dels
Calçots", así como todo el proceso de preparación de los Calçots y la elaboración
de la Salsa Romesco ,
su compañera precisa.
Mientras el fuego ponía en su punto a los Calçots, disfrutaremos
de un aperitivo compuesto de longaniza de pascua, chorizo y morcilla seca con
"Pa amb oli". Cacau del collaret,
tramussos y aceitunas, y unos rábanos y ensalada recién cogidos, acompañado de
cerveza y vino.
La “fiesta” continuó con las Tejas de calçots, la parrillada
de chuletas de cordero, blanco y negro y las alcachofas a la brasa.
Y de
postre, calabaza asada con mermelada de mandarina y mistela.
¿Podríamos seguir contando cosas de la Calçotada ?. Pues, sí.
Pero estas “fiestas” es mejor vivirlas que leerlas o escucharlas. (FOTOS: Xaq Frohlich y JB)
Tengo unas ganas de probar los calçots! Es que aquí no los venden, es como las cebolletas, no?? Que pinta tan deliciosa cuando se le quita el chamuscado y se baña en la salsa romeresco.
ResponderEliminarBesos
Es sensacional una calçotada entre amigos.
ResponderEliminarMe encantan los calçots, y estos tienen una pinta estupenda, y con una salsa romesco estan riquísimos
ResponderEliminarUne promenade bien gourmande.
ResponderEliminarMerci.
A bientôt
Me encantan las calçotadas, la salsa, la carne que se consume hecha en las brasas y el buen ambiente que rodea toda la fiesta.
ResponderEliminarEsas alcachofas de l'Horta me encantan.
Besos.
Aqui les llamamos rabanitos, que ricossss
ResponderEliminarPues esta semana es la segunda vez que me cuentan una calçotada y me están entrando unas ganas enormes de asistir a tan rico ritual. Suerte la tuya Oteador, que has disfrutado de esta y en ese entorno tan estupendo.
ResponderEliminarUn abrazo
Tengo que decir la verdad: nunca he estado en una calçotada y ello me pesa, porque tiene que ser un gozadón. Me alegro que lo hayáis pasado bien.
ResponderEliminarTodo me ha encantando....pero esas alcachofas.....muero por ellas!.......Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarSi ya tenia ganas de comer calçots viendo tu entrada creo que no tardaré mucho! me encantan i si són recien cogidos del huerto un lujo!!i què alcalchofas!
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